Día de la madre: mujeres que viven gracias a un trasplante de órgano y hoy son mamás

Erwin Valenzuela

Fotos: Carlos Contreras Merino

A los 29 años, la ingeniera ambiental Mariela Quispe Camacho recibió una terrible noticia. “Los doctores me dijeron que me quedaba un mes de vida por mi cirroris”, cuenta mientras su mirada se pierde en aquellos años. Un tierno beso la trae de regreso. Es Angie Luciana (3), la niña que dio a luz tres años después de recibir un trasplante de hígado que la salvó. 

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Así como ella, en vísperas del Día de la Madre, otras tres mujeres se reunieron ayer en el Hospital Nacional Guillermo Almenara de EsSalud para dar su testimonio, el de madres que vencieron a la muerte y dieron vida años después.

Mariela estuvo un año y tres meses en espera. La operaron un 8 de enero. La madrugada previa, señala, tuvo un milagro. “Ya no podía ni respirar. Dos veces se frustró mi trasplante, le pedí a Dios que me llevara. Eran las 3:00 am. A las 8:00 me llamaron del hospital: había una donante y yo era la elegida”.

MARíA ELENA Y ALONDRA

En la capilla del nosocomio, la secretaria huanuqueña María Elena Huamaní Atachahua (31) carga a su pequeña Alondra Antuanet, de un año y tres meses. “Solo quiero dar las gracias a esa alma buena que me salvó, si no fuera por ella no estaría aquí, tampoco mi hijita”.

“Enfermé a los 24 años, mis riñones ya no funcionaban, vine a Lima y me hacían diálisis tres veces por semana durante casi dos años. Me operaron en el 2011 y el año pasado me convertí en madre”, detalla.

Una historia similar a la de Milagros García Godos (36), quien tuvo un cuadro de cirroris hepática terminal y a sus 18 años recibió un hígado donado. “Soy la primera trasplantada de hígado que se convirtió en madre”. Su hijo es Víctor Matías (13).

Mientras Raquel Raymondi (43), tras recibir un trasplante de riñón en 2009, alumbró hace tres años a Thiago.

UNA RAZÓN PARA VIVIR

El Dr. Martín Padilla, jefe del Servicio Clínico de Trasplantes, sabe que las pacientes han superado todo. “Antes de la operación llevan un control estricto y luego deben tomar en promedio 30 pastilla al día durante seis meses a un año. Deben esperar que pase la medicación para ser madres, pues hay riesgo sobre la criatura”.

REALIDAD EN CIFRAS

Según EsSalud, seis mil personas esperan un órgano, pero solo hay 4,3 donantes por cada millón de habitantes. Tal vez porque apenas cuatro de cada diez familias acepta donar los órganos de pacientes con muerte cerebral, según la Organización Nacional de Donación de Órganos y Tejidos. ¿El resultado? Ocho mueren al día esperando un órgano, advierte el Colegio Médico del Perú.