Amigo taxista, ¿y si cambiamos un poco?

Cada año mueren en el Perú más personas por accidentes de tránsito que por inseguridad ciudadana. Es curioso que ningún candidato haya tomado en cuenta este dato en el último debate previo a las elecciones del próximo domingo. Piensan que no es necesario hablar del asunto.  

La Seguridad Vial no nace en el Congreso ni en Palacio de Gobierno. Nace en las escuelas y en el criterio de los conductores. En las escuelas, porque son los maestros, auténticos líderes de sus alumnos, los que deben enseñar a estos a circular. Deben concientizarlos que el hecho de manejar un carro no nos hace inmortales. 

Y en los conductores, porque al ser tantos, si fuesen respetuosos con el ciudadano de a pie, el ambiente en la ciudad cambiaría de forma radical. ¿Se imaginan que todos los carros se detuviesen al ver personas en un paso de peatones? ¿Les gustaría que cada vez que van a entrar en una intersección todos respetasen la incorporación en forma de cremallera? 

A todos nos gustaría que nuestros hijos no tengan que jugarse la vida cruzando calles cada día para ir al colegio o la universidad, pero muchas veces, cuando nosotros subimos al carro y agarramos el timón, nos invade un sentimiento de superioridad que hace que manejemos perdonando la vida a los peatones y en guerra contra el resto de conductores.  

Cuando manejamos tomamos posesión del carro, nos blindamos en él, es como el escudo del guerrero, y pensamos que somos invencibles y que los demás, por ser seres “inferiores”, deben apartarse.  

Si vemos una luz roja, cruzamos. “Que se detengan los peatones”, pensamos. 

En un cruce, metemos la nariz del carro para intimidar al contrario, buscamos cruzar antes que el resto. Y si vemos un grupo de niños, avanzamos poniéndolos en peligro. Ni siquiera nos fijamos si alguno tiene alguna limitación física que merezca nuestro apoyo.  

Candidatos, deben apoyar para que en las escuelas se desarrollen las capacidades y actitudes que permitan a nuestros jóvenes movilizarse de forma segura, sembrando en ellos el respeto a los demás. Me hubiese gustado escuchar a los candidatos hablar de eso, también de las ayudas a los taxistas que también han sido olvidados por ellos. Pero la SNTP va a recordarles cada día de los próximos cinco años al vencedor de este domingo. Se los aseguro a ustedes y les seguiré informando. Si quieren enviarnos sus propuestas, háganlo al mail de la columna.