PNP: investigan a 30 policías por muerte de recicladora en Huaycán

La muerte vino del cielo. Una semana después de la muerte de la recicladora María Solano Marín (54), quien recibió un balazo en la yugular cuando conversaba con dos vecinas en la Zona K de Huaycán, el peritaje balístico reveló que el proyectil que le impactó fue una Parabellum de 9 milímetros, el cual fue disparado de arriba hacia abajo y en la trayectoria de atrás hacia adelante respecto a la víctima y desde una larga distancia. 

LEE TAMBIÉN: Vándalos degollan 50 lechones y balean a trabajador en venganza por disputa de terreno

Por este hecho, treinta policías,entre ellos de la Dirección de la Policía Aérea (DIPA), del Escuadrón de Emergencia, de Servicios Especiales (USE) y de la Comisaría de Huaycán, que participaron en el control de los desmanes fueron sometidos a la prueba de absorción atómica a fin de determinar quienes realizaron disparos. 

De esta forma los detectives de la División de homicidios de la Dirincri esperan corroborar si fue como alegaron en un primer momento los testigos que el disparo provino de un arma desde uno de los helicopteros ECE-145, de fabricación francesa de la Policía Nacional,que sobrevalaron la Zona K ubicada a más de 2 kilómetros de donde ocurrieron los desmanes.  

Para ellos, existe además la posibilidad de que le haya caído una bala disparada al aire por un policía durante un control de disturbios. Pese a que en la zona donde falleció la recicladora no se registraron disturbios o motines. 

En aquella opotunidad, Antonia Rugel culpó a los policías y los acusó de dispararles desde los helicopteros.

“La bala ha venido del helicóptero. Ellos (los policías) han disparado. Incluso dos de los proyectiles perforaron el techo de mi casa y casi mata a mis dos nietos de 5 años y 6 meses de edad que estaban a mi lado. Felizmente, la bala chocó con el control del televisor”, dijo Rugel.