Australia: Conoce la sangrienta tortura dada a un hombre acusado de pedofilia y asesinato de un niño

Brett Peter Cowan fue recluido en una prisión por haber violado y matado a Daniel Morcombre, de 13 años, en Australia. 

Si bien pensaba que la cárcel iba ser el único castigo que tendría, no pensó que en su celda encontraría a su verdugo que le haría pagar la atrocidad que cometió contra ese joven: Adam Davidson hizo justicia por cuenta propia. 

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Todo comenzó en agosto del 2016, cuando Cowan estaba jugando a las cartas junto a otros reos en un área común. En ese momento, Davidson encontró el momento perfecto para concretar el plan que había diseñado hace un mes.  

Les pidió a los compañeros de Cowen que se alejaran de él para echarle el balde con agua caliente sobre su cuerpo. La inmediata reacción del pedófilo fue de pánico.  

"No quería matarlo. Solo quería herirlo. Que sienta el dolor", admitió Davidson, de 31 años, ante las autoridades cuando lo detuvieron.  

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"¡¿Por qué, por qué?!", gritaba Brett Peter Cowan, agonizando de dolor, frente a su compañero de celda, que no le había mostrado su repudio por haberle quitado la vida a un adolescente. Su castigo fue: terminar con severas lesiones. 

"Pensaba que no debía estar con esos abusadores sexuales. No podía ir a ningún lado, así que organicé mi propia venganza", finalizó.