Waldir Sáenz: “Viendo a los ‘Potrillos’ me hice futbolista”

Nicole Vásquez Cuba 

Fotos: César Bueno

 Waldir Sáenz no necesita mayor presentación. Es el goleador histórico de Alianza Lima, querido por muchos y  odiado por unos pocos, es uno de los mejores delanteros que ha tenido nuestro balompié. 

Hoy, retirado del fútbol activo, se alista para culminar su carrera como técnico, y afirma que espera llegar pronto a dirigir Alianza y a la selección también.

Igualmente, que uno de los dramas que ha marcado su vida e hizo crecer su sentimiento por el cuadro íntimo fue la tragedia del Fokker de 1987. 

—Está cerca de cumplirse 27  años de la tragedia del Fokker, imagino que todavía sigue ahí el drama.

—De hecho, sí. Yo tenía 13 años y se veía en las calles el pesar no solo de los hinchas de Alianza, sino a donde ibas, fue una tragedia.

—Y no hay respuestas hasta el momento...

—Eso es lo que nos preguntamos hasta ahora, por qué no se investigó bien el accidente.

—¿Crees que se trató de ocultar algunas cosas?

—Bueno, han pasado 27 años y hay que recordar a los “Potrillos” de la mejor manera.

—Consideras que es una herida abierta para los aliancistas?

—Sí, claro, primero para las familias y después para el hincha. 

—Cuando escuchaste la noticia ¿cómo te impactó, ¿qué fue lo primero que hiciste o pensaste?

—Como todo hincha lloré, me hacía la pregunta del por qué había sucedido. Fui a Matute con un grupo de hinchas esperando tener noticias y así todos los días.

—¿Viste jugar a los Escobar, Gonzales Ganoza, Bustamante y otros más?

—Claro, yo estuve presente en sur la última vez que ellos jugaron en Matute, contra UTC, una semana antes. Desde que los vi jugar por primera vez quedé impactado por el equipo, creo que ese fue el momento en que me di cuenta que quería ser futbolista de Alianza. Me imaginaba algún día compartir camerinos con alguno de ellos.

EN CINTA

—¿Te imaginas una película de tu vida?

—Una película mía (ríe) no lo sé, puede ser, pero más que nada de mi generación quizá. Fuimos tres veces campeones.

—Pero si eres el goleador histórico, el jugador más querido...

—Yo solo hice mi trabajo y agradezco al hincha de Alianza por reconocerme. Me basta eso para ser feliz.

—Luego del problema que tuviste con Susana Cuba, ¿conversaste con ella?

—No tengo que conversar con nadie. Yo solo quiero que mi equipo campeone y punto.

—¿Qué decirle a los jóvenes valores que pese a que le dan oportunidades siguen por el camino errado de las fiestas y el desorden?

—Cada uno tiene su manera de vivir, pero yo les recomendaría que miren los buenos espejos en el fútbol y que traten de imitarlos, el fútbol cada vez es más profesional que antes, si verdaderamente les gusta solo tienen que disfrutarlo.

ÍNTIMA respuesta

—¿Cómo analizas la actuación de Alianza en esta temporada?

—Del presente de Alianza no quiero opinar porque prefiero evitar comentarios que después se tergiversen.

—¿No te gustó entonces el estilo de Sanguinetti? 

—Cada técnico tiene un estilo diferente, a mí me gusta que gane y en general eso es lo que siempre pide el hincha.

—Aunque muchos criticaron la primera parte del torneo. 

—Siempre habrá críticas, el hincha solo pide que su equipo gane.

—¿Sanguinetti es un buen técnico para Alianza Lima?

—No lo sé, él ahora está viviendo su momento.

—Ahora es Sanguinetti, quizá más adelante Waldir Sáenz.

—Eso es un proceso todavía, para llegar a mi equipo sé que tengo que quemar etapas y me estoy preparando muy duro. Mi objetivo es llegar a Alianza y campeonar.

—¿Cuánto te falta para terminar tu carrera como técnico?

—Me falta un año más por la Videna para poder hacer mis pininos con menores.

—¿Seguro que uno de tus sueños es trabajar en la selección?

—Uno siempre tiene que pensar en grande, si se da la oportunidad no la desaprovecharía.                   

COMPRAS DE NAVIDAD

Waldir no solo se preocupa por el fútbol, además ya tiene encima las compras navideñas que hará para sus engreídas Tayra (2) y Thaís (11). “Mis hijas son mi vida. ¿El varoncito? no, ya no lo busco, no hay legado mío ni nada por el estilo (ríe). Las compras navideñas me tienen loco, hay que elegir bien sus regalos”, acotó.