Daniel Chávez: El 'poeta' de lo goles

Hugo Rodríguez

Fotos: Jaime Mendoza

 TRUJILLO. Por “culpa” de Daniel Chávez  en esta ciudad gritar “gooooooooooolllllll” se ha hecho costumbre. Porque sucede que el delantero chalaco ya tiene en su cuenta con César Vallejo nada menos que 31 tantos desde que el 2013 puso su firma por el poeta.

En esa marca ha igualado con el argentino Demus, que hasta hace poco era el número uno de los goleadores del equipo tujillano. 

Se formó en el Cantola, se hizo profesional en Bélgica y ahora la rompe en el poeta.

–Tu equipo está puntero y eres uno de los máximos goleadores de la historia de César Vallejo, no es poco, ¿no?

–Gracias a Dios tenemos un buen comienzo para el equipo y en lo personal trabajé para cumplir mi objetivo, es una ilusión que tengo de ser el goleador histórico de Vallejo, para alegría de la familia y de la institución.

– ¿Qué gol te ha gustado más de los 31 que has hecho en Vallejo?

– Tengo goles feos y bonitos, pero el que más me gustó fue el que anoté ante UTC en Casa Grande en el 2013. Cedrón mandó un centro, la paré de pecho giré y la metí. Para mi papá, que siempre me sigue, le gustó mucho y siempre me lo recuerda.

– Pasa el tiempo y todavía te siguen apodando “Bombarderito” en alusión a Claudio Pizarro. ¿Quisieras cambiar de apodo?

– No, estoy contento con el apodo de “Bombarderito”, me lo pusieron desde muy chico y me siento cómodo, me gusta y, efectivamente, estoy para bombardear las redes de los rivales.

SUS INICIOS

–Tu carrera profesional empezó fuera de tierras peruanas, ¿no?

–Sí. Me inicié en Cantolao a los 12 años porque siempre me gustó el fútbol a pesar de las dificultades que tuve desde niño. Cuando estaba muy joven, me fui a jugar al extranjero, y no pude debutar en Perú, pero sí lo hice en el Brujas de Bélgica a los 18 años. Tuve contrato por cinco años y conocí lo que es el Viejo Continente.

– ¿El fútbol es universal pero tu adaptación en Bélgica cómo fue?

– En Brujas fue difícil adaptarme, era otro mundo para mí, había muchas dificultades como el idioma, la comida y los estilos de vida. A ese lejano país llegué solo, y con el tiempo me fui adaptando a su gente y sus costumbres, sobre todo al frío (sonríe).

– ¿Te gustaría  retornar al Brujas?

– Sería una oportunidad porque fue donde aprendí mucho y tuve buen trato y futbolísticamente se juega mejor y hay mayor oportunidad. Allá hay cosas que no se dan acá, no se concentra y hay mucha disciplina, tienen buena formación. Es otro nivel de fútbol.

– Tú eres del Callao, ¿alguna vez desearías vestir la camiseta del Sport Boys?

– Hubo una opción de ir al Boys, pero por ahora lo veo muy complicado, quizás más adelante, uno sabe cómo es la gente ahí de linda. Ahora estoy para poder mostrarme y salir nuevamente al exterior, ese es mi otro anhelo.

NO ES TRAVIESO

– Los jugadores siempre están envueltos en escándalos, ¿cómo hacer para no ser parte de ese show?

— La verdad eso de estar en la farándula no me gusta. Siempre he tenido una vida serena con mis hijos y familia. Todo tiene su momento, y creo que uno debe divertirse sin hacer escándalos.

– Pero estar lejos de los escándalos les cuesta a muchos a futbolistas.

– Hace poco tuve un accidente, había ido al norte, y ese hecho marcó mi vida y de toda mi familia; fue fuerte, pero gracias a Dios nadie salió herido. Ahí pude pensar mucho; en un momento, recordé todo lo que me pasó en mi vida entera y entendí que Dios me dio una segunda oportunidad, y ahora no lo defraudaré.

– Sé que eres católico y lees la Biblia.

– Yo pertenezco a una congregación que se llama el Ministerio Selim, en el Callao, y, he aprendido a compartir la Biblia y practicar lo que ahí dice. Desde pequeño mi madre me inculcó todo sobre ello, me siento bendecido y agradezco porque me ha ido muy bien en la vida.

– A tu equipo se le nota con mucha espiritualidad.

– Sí, nos hemos juntado un buen grupo, es “Pipe” (Luis Cardoza) quien siempre está en el tema religioso, envía bonitas frases para meditar, usando el Whatsapp y eso ayuda mucho para crecer como persona y profesional.

EL AMOR Y FAMILIA

– Leí que el fútbol te dio la oportunidad de conocer a tu esposa.

– En Bélgica pude conocer a Ingrid, quien ahora es mi esposa. Ella es ecuatoriana; desde que nos conocimos me ayudó mucho en realizarme como profesional del fútbol. Ella y mis hijos (Siara y Andréis) son todo en mi vida. 

–Dicen que eres un gran chef, ¿te comparan con Gastón?

– No. Mi esposa es la que cocina. Una vez llegó un amigo y  me puse a cocinar y vi que no es lo mío, así que tuve que decirle a mi esposa que me ayude para quedar bien porque yo no la hago en la cocina.