Lucho Cuéllar armó otro escándalo borracho

“Kiko de la cumbia” no tiene cura. Es que en total estado de ebriedad insultó y se enfrentó de boca con un asistente a un concierto realizado por la orquesta Candela el fin de semana pasado, en Moquegua.

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Cantante está de mal en peor.
Cantante está de mal en peor.

“Kiko de la cumbia” no tiene cura. Es que en total estado de ebriedad insultó y se enfrentó de boca con un asistente a un concierto realizado por la orquesta Candela el fin de semana pasado, en Moquegua.

Totalmente fuera de control el cumbiambero vociferó frases irreproducibles, interrumpiendo por un momento la presentación de la agrupación que integra.

Ayer el polémico intérprete estaba anunciado en una conferencia, pero nunca apareció. Según averiguamos, sería expulsado de la orquesta debido a sus constantes actos de indisciplina.

En su Facebook pidió disculpas a sus seguidores y a los dueños de la empresa musical que lo acoge.

“Entiendo que me excedo, que reaccioné porque alguien me atacó, no debí actuar así”, expresó.

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