Relaciones humanas

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Madre e hija: relaciones humanas.
Madre e hija: relaciones humanas.

Para entender las relaciones humanas es necesario saber que cada persona tiene un sistema distinto de costumbres, valores, creencias, etc, y si se relacionan es normal que siempre surjan conflictos, diferencias o que hayan malos entendidos. No hay dos personas que piensen exactamente igual, cada ser humano interpreta la realidad de un modo distinto en base a sus conocimientos, a sus características y experiencias. Por eso hay fricciones que, si no existe una buena comunicación y empatía, se convierten en conflictos mayores y hasta en agresión.  

Hasta dónde es normalLas hijas que tienen malas relaciones con las madres suelen rodearse de un grupo con muchos factores de riesgos y son también vulnerables a manipulaciones de otros, para gestar violencia contra su propia familia. Es normal que una adolescente exponga su punto de vista diferente al de su madre, pero no que se imponga sin tener la capacidad de mediar una conciliación. Los padres deben entender también que los hijos deben tener la razón y reconocer cuando se equivocan. 

Señales de alertaLos padres deben estar atentos a las actitudes de sus hijas siempre. Las hijas que guardan resentimientos no exteriorizan lo que sienten, se aíslan, cambian de comportamiento, de amigos, de vestimenta y de hábitos. La mejor forma de prevenir que este malestar crezca o se canalice mal, es abrir los canales de comunicación, preguntarle cómo percibe la vida, si hace comentarios negativos es porque algo no anda bien con ella, por lo que se requiere replantear qué buscan como familia. OtrascausasEn la infancia: Desde que nacemos construimos nuestra área afectiva. Estudios revelan que a los siete meses de nacido, el infante ya percibe el afecto y a los dos años ya conoce quién es la persona que le da cariño y protege. Cuando hay ausencia de la madre en esta etapa, es más fácil que no se desarrollen empatías y buenas relaciones.Errores de la madre: Las madres castradoras, mutilantes que merman la autoestima de las hijas, las agreden verbalmente y las minimizan, causando grandes daños psicológicos a las hijas tanto a nivel conciente como inconsciente. Muchas veces las menores responden con rebeldía, no acatan las normas, mienten, roban, son impulsivas. Debes saber...1. Las niñas que sufren maltrato o abandono de parte de la madre perciben una realidad agobiante y construyen en su cabeza situaciones de dolor y frustración con las que viven si no se tratan. 2. Esas malas experiencias sumadas a una carga genética relacionada con rasgos sicopáticos o sociópatas desarrollan la personalidad al límite. 3. Una hija afectada y con rasgo psicopático, puede desarrollar un cuadro de sadismo y pérdida de sensibilidad al dolor de la madre.Traumas sin resolver. Algunas hijas suelen tener engramas (situaciones negativas, frustrantes) en su vida que las persiguen durante su desarrollo.  Malos entendidos. Las discusiones entre la madre y la hija que no se hablan ni resuelven generan resentimientos y pueden formar parte de engramas. En la niñez. No solo en la adultez se pueden fijar en la mente situaciones negativas sino también en la niñez y sin que la hija las recuerde concientemente. Inconsciente. Las niñas menores de diez años pueden haber grabado momentos con su mamá que les causó dolor y que ellas interpretaron como catastróficas.

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