¡La mágica hoja de laurel!

La hoja de laurel es un excelente sazonador para tus comidas, pero también combate varias enfermedades como la gripe, anorexia, resfriados, reumatismo e inflamaciones de la boca.Tiene un poder carminativo, expectorante, desintoxicante, antiviral y se le emplea como estimulante digestivo. Se utiliza para tratar la bronquitis y enfermedades relacionadas con el sistema nervioso, el tracto digestivo e intestinal.Las infusiones de laurel son ideales para la sinusitis, ya que sus aceites volátiles posibilitan la descongestión mediante la expulsión de las secreciones. También ayuda a curar la resaca, la intoxicación o el envenenamiento, pues al beber este té, nos ayudará a vomitar y por ende, eliminar todo lo que ha provocado el daño.FORMAS DE EMPLEOPara tratar problemas digestivos debemos añadir un par de hojas de laurel a las comidas o masticar tres hojas de laurel con el estómago vacío antes de las comidas principales. Ambos tratamientos se deben seguir durante un mes.Las infecciones en las encías, la pérdida de la voz o la ronquera de la misma, pueden tratarse también con laurel, mediante gárgaras con agua hervida de las hojas; dejar enfriar un poco y luego tomar.También es eficaz a la hora de reducir la fiebre y los dolores de cabeza, y da mayor energía al cuerpo, despierta la mente, agudiza los sentidos y da claridad. Una infusión se hace con diez hojas en una taza de agua hirviendo y se bebe tres veces al día.