La Reincorporación de Tacna al Perú: ¿Qué bandera recorrió las calles en plena ocupación chilena?

¿Qué hiceron lo pobladores de Tacnapara bendecir la bandera peruana en el día de la patria en plena ocupación chilena? Conoce la lección que nos dejaron.

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Procesión de la bandera en Tacna
Procesión de la bandera en Tacna

Hoy, 28 de agosto, se conmemora la 'Reincorporación de Tacna al seno de la Patria', con motivo del acto realizado desde el 28 de agosto de 1929, donde se hizo efecto el Tratado de Lima, que determinó la devolución de Tacna por parte de Chile a Perú.          

Con motivo de ello, reproducimos una crónica de la que fue testigo presencial el "Poeta del Cautiverio", Federico Barreto, en el que cuenta con fervor la demostración de amor a la bandera nacional que tuvo todo un pueblo que permaneció casi cinco décadas en cautiverio. 

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¿Qué hiceron los tacneños? En su afán de bendecir la bandera peruana en el día de la patria, aceptaron realizar un mudo desfile por las calles de la Tacna Cautiva. Cumpliendo un compromiso de honor, no se oyó exclamar ni el grito más insignificante. 

El escrito fue publicado en la revista "Variedades" y posteriormente en el diario "El Comercio" de Lima.

<<La directiva de la Sociedad de Artesanos de Auxilios Mutuos "El Porvenir" quiso hacer bendecir un estandarte de seda en la iglesia parroquial de San Román. Se nombró una comisión de socios para entrevistarse en la Intendencia y conseguir el permiso correspondiente; la negativa del Intendente, General Vergara fue rotunda: "no quiero banderas en la calle, dijo, provocan manifestaciones patrióticas y esas manifestaciones dan origen a contramanifestaciones que ponen en peligro el orden público".

Días después y deseando la directiva de la Sociedad "El Porvenir", festejar lo más solemnemente posible el 28 de julio de 1901, insistió en solicitar el permiso deseado y el Intendente de la Provincia volvió a denegarlo. Regresó la comisión para expresarle que el desfile por las calles se realizaría sin alterar el orden público.

De súbito el Intendente cambió de parecer para expresarle a la comisión: "Tienen ustedes el permiso que solicitan pero con la condición de que me garanticen bajo responsabilidad personal que al conducir la bandera por las calles, el pueblo peruano no hará manifestación alguna de carácter patriótico. Exijo desde luego de un modo concreto que no haya aclamaciones ni vivas, ni el más leve grito que signifique ni remotamente una provocación para el elemento chileno".  Está bien, señor Intendente, dijo uno de ellos, hablando por todos; no se oirá ni un solo grito en las calles durante la procesión".

Al día siguiente los diarios peruanos daban a conocer al público el grave compromiso contraído por la comisión. Recomendaba eficazmente a los hijos del lugar que el día de la fiesta, honraran a la Patria con su actitud, cumpliendo con la palabra empeñada al jefe de la provincia.

La traslación del estandarte se realizó en una caja por las calles poco concurridas a fin de evitar en lo posible que el hermoso estandarte fuese conocido por el vecindario antes de la ceremonia.

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Se inició esta a las 10 de la mañana; la iglesia se encontraba atestada de gente en sus tres naves. Oficiaba la misa en el altar mayor el Vicario Dr. Alejandro Manrique. Procediose a bendecir el estandarte, se cantó un Tedeum Solemne y enseguida el Vicario subió al púlpito y como transfigurado por el patriotismo que flotaba en el ambiente habló a la concurrencia aconsejándoles a "mantener siempre latente en el alma el amor a Dios y a la patria, a soportar con entereza las amarguras del cautiverio y a soportar sin desmayo en la reparación justiciera del porvenir".

La plática sagrada del Padre Manrique intitulada "La Cruz y la Bandera" conmovió al auditorio hasta las más íntimas fibras del patriotismo tacneño.

El gentío va desocupando la iglesia paulatinamente para estacionarse frente al templo. De súbito aparece en la puerta la bendita enseña del bicolor peruano, "hermosa y resplandeciente como nunca" y entonces en aquel sublime instante como movidos por algo inesperado y excelso las "diez mil personas congregadas en el atrio y en las calles se agitaron un momento y luego sin previo acuerdo, como impulsados por una sola e irresistible voluntad, cayeron a la vez de rodillas y extendiendo los brazos hacia la enseña bendita de la patria".

El poeta Federico Barreto, testigo de esta imponente ceremonia, prosigue: "No se oyó exclamar ni el grito más insignificante. Sellados todos los labios por un compromiso de honor, permanecieron mudos y en medio de aquel silencio extraño y enorme que infundía asombro y causaba admiración, la bandera levantada muy arriba, avanzó lentamente en medio de aquel océano de cabezas descubiertas y pasó la bandera y detrás de ella, como enorme escolta, avanzó el pueblo entero y aquella procesión sin música ni aclamaciones recorrió imponiendo respeto los jirones más céntricos de la ciudad cautiva".

Espectando el desfile de encontraba un soldado, sobreviviente del Campo de la Alianza; reverente se acerca para besar el pabellón nacional; un conjunto de niños imitan la noble acción del exsoldado de la patria, presentando un espectáculo emotivo y sublime.

Avanza imponente el cortejo detrás de la bicolor, rumbo al local de la Sociedad de Artesanos en el cual el gentío parecía transformado por el dolor y el patriotismo.

Los transeúntes al paso del estandarte se descubren reverentes y pálidos de emoción saludan a la bandera y hasta los soldados y oficiales chilenos impresionados hondamente de esta lección de patriotismo, levantan la mano a la altura de sus kepís.

Llegado el desfile a la Sociedad de Artesanos se realiza un programa en homenaje al día de la patria.

Barreto dice: "Qué sucesos de toda índole han impresionado fuertemente mi espíritu, pero ninguno lo repito ha dejado huella más honda en este mi corazón".

Este afán del pueblo tacneño de bendecir el estandarte en el día de la patria y realizar ese mudo desfile por las calles de la Tacna Cautiva es una sublime lección ejemplar de entrañable fidelidad a la patria ausente y al blanco y rojo de nuestro bicolor nacional.

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Nota: El poeta Federico Barreto publicó el artículo que lleva este título en la edición del "Comercio" de Lima el 28 de julio de 1921.>> 

Bibliografía: "Historia del departamento de Tacna". Nilo Rueda Valverde. Libro que pertenece a la biblioteca especializada del Instituto de Estudios Históricos del Pacifico (INEHPA).

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