Abencia se hizo humo

Enterada de las declaraciones de su ex chofer Pedro Mamanchura que la sindican como autora intelectual del asesinato de la folclórica Alicia Delgado, Abencia Meza optó por desaparecer   y su paradero es un misterio. Se supo que luego del arresto de Mamanchura, unidades policiales en simultáneo fueron al encuentro de la cantante vernacular en sus domicilios conocidos. Un grupo de agentes llegó a la casa de la intérprete en el asentamiento César Vallejo, en Los Olivos. Allí el coordinador de la artista, John Leyva, habló sobre el tema. “Por recomendación médica Abencia está fuera de Lima. Al enterarse de la noticia de la captura se puso feliz. Ahora está tranquila”, afirmó Leyva a los investigadores y la prensa que aguardaban alguna noticia de “Pistolita”. La cantante escudada en el descanso médico, no quiso tener contacto  con la prensa. La única comunicación la brindó su jefa de prensa. “Por prescripción médica, Abencia salió fuera de Lima para relajarse. No puede recibir noticias que la impacten, pues podría tener otro pre infarto”, señaló la fuente. Meza según esta versión estaría en Huaral, acompañada de su doctor de cabecera. Otros allegados a Abencia agregaron: “Ella debe estar tranquila pero no la dejamos sola. Siempre hay alguien con Abencia conversándole si está despierta o velando su sueño. Le han recetado tranquilizantes para controlar sus emociones. Sin embargo, otras fuentes indicaron que “Pistolita” aún permanece en Lima, en casa de una amiga en Los Olivos, acompañada de un numero reducido de allegados y familiares. Por las declaraciones preliminares de Mamanchura, la Policía ya te ndría orden de detención preliminar de la cantante, a quien capturarían en las próximas horas sí o sí. (A. Líbano)            Salen pericias psicológicas Los resultados de las pericias psicológicas practicadas a Abencia Meza en la Dirincri no la favorecerían mucho, pues habrían  arrojado que sería una persona con tendencias violentas y cambios bruscos de personalidad. La “Reina de las parranditas” se presentó voluntariamente a la Dirincri el viernes pasado, donde permaneció ocho horas siendo sometida a un exhaustivo interrogatorio de 70 preguntas que terminaron demoliéndola.