Diego Maradona: "Sufrí tanto ante Perú"

Se venían dos patidos contra Perú, primero en Lima y después en Buenos Aires, y fueron terribles. Yo no recuerdo haber sufrido tanto en una cancha como en aquellos dos partidos. Por cuestiones distintas, eso sí. En el primero por la marca de Reyna que todo el mundo se acuerda. ¡Hasta La Habana me siguió el hijo de puta! Cuando estuve allá me mandó una pelota.

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Me acuerdo que en el partido de ida, en un momento me fui de la cancha para que el doctor me atendiera y él se quedó al bordecito esperándome. No jugó: ¡me seguía!.

Fue el domingo 23 de junio y perdimos 1-0 con gol de Oblitas. Insisto, me gustaba la marca personal porque me los saco de un toquecito, pero aquel tipo se le fue la mano, la pierna, todo... Como Gentile el 82, que me había cagado a patadas.No le decía ni una palabra porque mi arma contra esas cosas fue jugar.

En el fútbol de hoy, Reyna no hubiera durado 45 minutos en la cancha. Y aquella vez jugó los 90. 

EL TOQUE PERUANO

Te juro hace unos años, cuando jugamos en el Monumental contra Perú, en las eliminatorias para Sudáfrica me vinieron a la mente otra vez aquellas imáginas terribles. Ojo, no era que no confiaba en nosotros, en mi, pero parecía que todo se ponía en contra...La cancha pesada, la lluvia, los peruanos que de golpe jugaban como el Bayern Munich. Tenían buienos jugadores más allá de Reyna. Estaban Velásquez. Cueto, Uribe, Oblitas.

Ahi te das cuenta lo difícil que es ser DT, que querés entrar, meterla vos y no podés. Y lo difícil que es jugar con una lesión: estaba fundido, con la maldita rodilla derecha que me dolía. No me podía sacar de la cabeza la palabra repechaje. Si perdíamos íbamos al repechaje y faltaban 10 minutos y perdíamos 2-1.

Terrible, terrible, ¡qué manera de sufrir!

LA PATADA DE CAMINO A NAVARRO

Aquel partido jugó Camino por Clausen y en la primera jugada lo sacó a Franco Navarro con un patadón. ¿Lo sacó de la cancha! Pasados los 10 minutos ya ganábamos 1-0 con gol de Pasculli, pero nos empataron y pasaron al frente antes del final del primer tiempo. Entonces aparecieron los fantasmas.

En el entretiempo nos reputeamos porque sabíamos que estábamos perdiendo por errores nuestros, no por mérito de ellos. Bilardo no dio ninguna indicación. Nos gritó que nos dejáramos de joder y que saliéramos a clasificarnos para el Mundial.

Error, error...

Porque salimos como locos y estuvimos más cerca de que nos metieran el 3-1 que nosotros el 2-2. El reloj volaba.

EL GOL AGÓNICO DE GARECA

Me tiré para atrás para entrar en juego y tratar de meter pelotas de gol, pero hay una pelota fundamental, que no fue mia. Quedamos tres contra dos: Barbadillo, Uribe y no sé quién más contra Trossero y el Pato Fillol. Si Ureibe se la daba a Barbadillo metia el 3-1 y se acababa todo.Pero Uribe amaga para y cuando se va, se resbala y la pega mordida. Y el Pato la agarra arroba y salimos de esa jugada,

Y ahi viene el gol nuestro.

Llegó aquella jugada de Passarella y el toque de Gareca, como Palermo mil años después, en las eliminatorias para sudáfrica. Siempre lo dije: que Martín haya puesto el pie fue como cuando Gareca la empujó.

En una charla, cuando todavía me hablaba con él, se lo dije a Bilardo tendría que haber llevadp a Gareca al Mundial de México como  yo lleve a Palermo a Sudáfrica. ¿Sabes qué pasa? Gareca se lo merecía Gareca se lo merecía por todo lo que le había dado a Bilardo cuando no estaba yo. Mientras yo no estaba uno de los que sostuvo a Bilardo fue Gareca.