Edita Guerrero: Padres de fallecida cantante podrán visitar a sus nietos

Rosario Aronés C.@RaCnova

El juez de Familia de Piura, Ernesto Rebaza Iparraguirre, dispuso que los padres de la fallecida cantante Edita Guerrero pueden visitar a sus nietos, hijos de Paul Olórtiga Contreras pero en su vivienda, con el fin de no perturbar la estabilidad emocional de los niños.

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Esta disposición fue dada por el magistrado del Primer Juzgado de Familia, luego que los padres de Edita, Pedro Guerrero y Eladia Neira llegaran a un acuerdo y conciliaran con el ondontólogo para poder visitar a los menores.

En su resolución del magistrado indica, que respecto al régimen de visitas acordaron que los demandantes, los abuelos maternos Pedro Guerrero Melendrez y Eladia Neira García, podrán visitar a sus nietos Paul (4) y Valeska (2) en su casa donde viven con su padre Paúl Olórtiga.

Indica, que a fin de restablecer las relaciones familiares entre los demandantes en su condición de abuelos y tíos maternos y los mencionados niños , a fin que estos se familiaricen con ellos, los identifiquen como familiares maternos y se sientan cómodos con su presencia.

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Agrega, que la visita será sin externamiento, esto implica que los abuelos visitarán a sus nietos en el domicilio del demandado Paul Olórtiga Contreras, ubicado en la calle Manuel Villar C-1 Urbanización Las Mercedes, de lunes a viernes de cada semana y de dos a tres de la tarde, pero siempre debe estar vigilada por el padre de los menores con su abuela María Contreras.

Luego que los niños se hayan familiarizado con sus tíos y abuelos maternos pueden lograr un externamiento, es decir que salgan a la calle con ellos, pero que no implique hacía los menores un efecto negativo sobre su estabilidad emocional, por que se acuerda que el equipo multidisciplinario hará un seguimiento del desarrollo de régimen de visitas acordado.

Posteriormente, este equipo especial realizará un informe motivado e informará al Juzgado y por ende a las partes si se dan las condiciones para que los mencionados niños sean externados, fijando un tiempo prudencial por seis meses. Y se fijará una audiencia para determinar dicho pedido.

Las partes están obligadas a informar sobre el cumplimiento del acuerdo y cualquier otra situación negativa que ponga en riesgo la estabilidad física y emocional de los mencionados niños.