Trujillo: Policía y sus hermanos destrozan un salón de belleza

Wilson ArandaUn policía y sus tres hermanos destrozaron un  salón de estética porque presuntamente el propietario le habría faltado el respeto a la madre de los hermanos en una discusión familiar, en Trujillo.LEER MÁS: La Libertad: La Jauría le exige 50 mil soles a alcalde de Pueblo Nuevo para no asesinarloLos hechos ocurrieron el miércoles último a las 7:30 de la noche, cuando el suboficial PNP Henry Rubio Zavaleta irrumpió junto con sus hermanos Arturo, Ángel y Alfredo, al salón de estética LE, perteneciente a Luis Enrique García Guerra. El local está ubicado en la calle Isabel Bobadilla  Mz A2 lote 17 en la urbanización El Recreo.Una vez dentro, los cuatro habrían agredido al dueño, a su hermana Milagros, a su sobrino M.L (14), a su cuñado Luis Cárdenas y a una trabajadora del salón de belleza, María Sifuentes. No contentos con ello, destrozaron las lunas, mamparas, muebles y otros enseres.Según Luis García, una de sus primas es pareja sentimental  de uno de los hermanos, pero constantemente la maltrata física y psicológicamente, llegando incluso a botarla de la casa donde ambos viven.“La última discusión que tuvieron sucedió lo mismo, la echó de la casa y mi familiar vino a quedarse en mi casa. Eso bastó para que la madre de los hermanos atacantes llegara a mi negocio para reclamarme por qué le había dado cobijo. Incluso la señora nos insultó. Sin embargo a sus hijos les mintió que nosotros la habíamos agredido”, refirió consternado el dueño del negocio.TAMBIÉN VEA: Extorsión: detienen a colombianos que pertenecerían a red de prestamistas (VIDEO)Es así que tras haber escuchado que su progenitora había sido maltratada, los cuatro hermanos fueron al salón de  belleza y en represalia causaron los destrozos.En esos momentos, una unidad del Serenazgo de Trujillo rondaba por el lugar e intervino a dos de los atacantes: Alfredo y Ángel, quienes fueron llevados a la Comisaría de Ayacucho. Las investigaciones continúan también en la Inspectoría de la Policía para deslindar la responsabilidad del efectivo Henry Rubio.